jueves, 29 de septiembre de 2011

Si me vuelves a tomar la mano, me voy contigo, loca.

lunes, 1 de agosto de 2011

Verso Terso

El viento sopla fieramente muuy aparte de mi
Giro el tiempo y sirve regresa para aprender
Nuestro intento por fortificar algo muerto es como sobrevolar a través del tiempo.
El susurro a mi oido dice el dolor de cabeza que amortigua
La sobresalida del vago con una gota de sangre en el vino.
¿Cómo aprender de lo herido?
¿Cómo cicatrizar algo no sucedido?
Siempre queremos fortificar la muralla y destruir ladrillos que a través del tiempo sabemos que caerán con solo un suspiro.

lunes, 25 de julio de 2011

hay un fantasma que me habla, me dice que hacer
controla mi alma, me hace ceder
no digas nada, te perseguirá
acuéstate en la cama, ya te dormirás

sueña conmigo que yo soñaré contigo
yo siempre te convido de mi corazón hasta el último latido...

jueves, 21 de julio de 2011

Carriles de un sentido y sales sin salida.

y sin querer te volviste mi adicción, quizá solo fue una confusión
el tiempo lo quiso así, y así tendrá que ser
todo el día siento un suspiro detrás de la oreja y todo fue tan rápido que lo noté como su hubiese sido una eternidad

el mundo gira a mi alrededor y ella gira a través de mi mundo
el mundo gira a mi alrededor y en sus ojos escucho lo que ella no quiere decir

la pena y lo de atrás lo dejemos atrás y todo el porvenir
un largo tiempo como por ejemplo un sueño de nunca acabar, un coma sin final, un veneno de efecto tardío, un síndrome y un espiro para forzar

ya que el mundo gira a mi alrededor y ella empieza a girar a  mi alrededor
y el mundo girará a mi alrededor  y en sus ojos escucho lo que ella no quiere decir

lunes, 6 de junio de 2011

El Caballero Violeta.

Antes que nada tengo que decir que cuando escribí ésta historia, pues, tuve una OBVIA inspiración con el cuento de La Señorita Green de Guillermo Samperio.








Éste era un hombre común y corriente, como tú y como yo, que, sin saber, algún día se convertiría en un hombre violeta. Violeta por todos lados, incluso hasta donde sus ojos no alcanzarían a ver.

Todo empezó cuando él era un niño de 6 años y amaba el color rojo, quería todo rojo y siempre experimentaba con la escala de los rojos. Incluso una vez deseó ser más rojo que el mismo rojo.
Vestía camisetas rojas, pantalones rojos, zapatos rojos, calcetines rojos, ropa interior roja. Rojo por todos lados.

Un día, enlistándose para su primer día de escuela, al mirarse al espejo notó en su iris color gris que había un punto de su color menos preferido. Un punto color violeta.
No me comentó a nadie esperando que no lo notaran  y así fue.
Dejó de ver a las personas a los ojos, volteaba la mirada y todos pensaban que tenía pena, pensaban que era normal ya que el solo era un niño de 6 años que amaba el color rojo.

El punto color violeta no se iba y el niño fue creciendo al mismo tiempo que el punto también crecía hasta que el iris gris del niño se había tornado completamente violeta y fue entonces cuando notó que había un punto igual en su otro iris que antes no estaba. Y pasó lo mismo, su otro iris gris, con el paso del tiempo, se torno completamente violeta.

Hubo mucho dinero desperdiciado en doctores de todo tipo que no podrían hacer nada y no lo hicieron por el niño con los iris color violeta.
El niño creció, se convirtió en un joven y las manchas color violeta se esparcían por todo su cuerpo, luego en un adulto y su cuerpo ya era totalmente violeta. Violeta por todos lados, violeta hasta donde sus ojos no alcanzaron a ver.

Al menos el hubiera deseado ser rojo. Tan rojo como su color preferido, incluso mucho más rojo. Pero no.




Todos lo veían raro, porque ver a un hombre color violeta no era cosa de todos los días.
Con el tiempo, por su barrio, ganó el apodo de “El Caballero Violeta”.
“Buenas tardes, Caballero Violeta”, le decían las señoras al pasar.
Muchos niños lo se asustaban y huían, muchos otros se acercaban con tanta curiosidad y le preguntaban que qué sentía ser violeta.
“Nada, en realidad no es la gran cosa. Aunque en realidad, hubiera preferido ser rojo”. Siempre respondía lo mismo a la misma pregunta.

Un día llegó a sus oídos la historia de una mujer que era verde, tan verde como él era de violeta. Tan verde como las hojas de los árboles en una verde primavera. Y el que pensaba que era la única persona en el mundo de un solo color.

Una tarde fue a buscar a la mujer color verde,  o “La Señorita Green” como era mejor conocida.
Él fue a la casa de la señorita green y ella, al abrir la puerta, el caballero violeta vio una cascada de peces y la señorita green vio un dragón encantador.
El hombre violeta se acercó a la mujer verde y la mujer verde se acercó al hombre violeta.
Entonces, el dragón violeta voló hacia la cascada y de ahí se puso a jugar hasta que se dejó ir en la corriente de peces, luego cerraron la puerta.

miércoles, 20 de abril de 2011

Para hacerte sonreir no hace falta destruir todo aquello que te hace descubrir lo mal que puedes estar a veces
no puedo hacerte corregir errores que no sabes comprender.
Para dejarte en soledad no hacer falta abandonarte, solo hace falta amarte para que a la noche terminemos siendo uno.
Para hacer que te enojes no tengo que llegar con reproches, tengo que llegar con el corazón lleno y con caricias amantes y evitar lograr quererte como antes.
Para que caigas en llanto tengo que rezarle a algún santo o llegar con un canto de esos que amas tanto.
Para dormir en tu compañía, guardo el libro de gabriel garcía enrollado en un listón que queda perfecto con tu cabellera y eso no le queda a cualquiera.

No puedo evitar ser lo que soy, no quiero cambiar, tu puedes agujerar mi corazón, pero no podrás meterte a mi cabeza porque me terminarás dando la razón.









Había una entrada que quería dedicar a unos amigos porque pues, ellos me demostraron que me apoyan en todo.


Gracias, esas cosas se aprecian y mucho.
¡FUERZA Y WEBOS!
(Yo soy el de la derecha, ¡el del pelote! Jojojo...!)

sábado, 5 de marzo de 2011

¡Qué divertido, pues!

martes, 15 de febrero de 2011

Letanías autodidactas

La razón tiene miedo a salir.
Estamos atrapados en nuestra propia mente y no podemos salir.
Hacemos lo que queremos y luego nos damos cuenta de que eso estaba mal.
Paso por ti en la noche, te regreso en la madrugada, el sol extraña el alba y la luna extraña a aquellos murciélagos que salen a visitarla.
El conejo en la misma ya no está, la luna te ha dado la espalda y tu lo quieres saludar.
Vuelas y nunca vuelvas, grita y nunca llores, golpea y nunca perdones.
A algún lugar tienes que llegar, y si no sabes que camino seguir, será mejor apartar.

Si lo que te estoy diciendo, no le encuentras sentido, lee entre líneas.
Tal vez así entiendas las letanías que aquí he escrito.
Tal vez así entendamos el verdadero significado de la vida.
Tal vez es tiempo de dejar de caminar; correr y alcanzar.

La vida empieza a tener sentido si te volteas y ella ya no está.
Vivías, y puedes vivir después de eso.

lunes, 3 de enero de 2011

-¿quién eres?

-Soy Daryel...

-No, ese es tu nombre. Pero en realidad, ¿quién eres?

-Es difícil de entender.

-Sí, lo es. ¿A dónde vas?

-Al trabajo...

-No, esa es parte de tu rutina, pero en realidad, ¿a dónde vas?

-A ser alguien y tener una buena familia.

-Buena respuesta, pero, ¿eso quieres en realidad?

-Claro... como todos.

-Exacto, es como todos, eso no es lo que quieres, eso es lo que tienes previsto. Es solo un protocolo de la vida.

-Eso tiene sentido.

-No en realidad no lo tiene porque te estas dejando llevar por la voz de un extraño. Lo que en realidad debe de tener
sentido es lo que en realidad tu quieres, no lo que los demás te digan. Si crees poder hacerlo hazlo, no dudes. Si algo
sale mal, reparalo. ¿Ahora ya sabes quien eres?

-Una persona diferente que forjará su futuro a partir de sus parámetros, ¿no?

-¿Porqué me preguntas a mi? Aunque bueno, la respuesta es CASI correcta... Te falta mucho por aprender.